¿Alguna vez has pensado que para qué seguir? No estás disfrutando y no crees que vayas a hacerlo en bastante tiempo. Ves alrededor como al parecer al resto del mundo no le pasa lo mismo, te quedas atrás, cada vez más atrás. No encuentras esa forma de encajar que encuentran todos tan fácilmente. Situaciones que a los demás les parecen cotidianas, a ti no, quizá incluso te incomodan. Lo siento, pero tenía que soltar este párrafo sin pensar.
Esta película tiene algo de drama, historia romántica y se supone que de comedia. La parte de la comedia puede que no sea como se entiende generalmente. Produce situaciones absurdas que han conseguido arrancarme carcajadas como pocas han conseguido, pero no es una película de esas de entretenimiento cómico. La banda sonora me ha encantado, pienso que hacen encajar muy bien determinadas canciones.
Tiene de protagonistas a Keir Gilchrist (seguramente no te dice nada, pero yo lo he visto en un episodio de The Listener), Zack Galifianakis (el gordito de Resacón) y Emma Roberts (para quién solo le suene, la de Somos los Miller).
Es una película especial, más o menos. Me gustaría compararla con otra: El camino de vuelta (The way way back). Esa me gustaría (mucho) comentarla en alguna otra ocasión pero si el lector no puede esperar (quizá una eternidad) a mi entrada en este blog le recomendaría verla ya mismo.
Quiero destacar una escena en la que el protagonista le pregunta a una chica si le gusta la música y contesta con un “¿Te gusta respirar?”, simplemente me siento identificado.
Si ya quieres ver la película no mires ningún trailer que puedas encontrar por ahí, SPOILERS, este no desvela nada.
Personalmente, la metería en un saco de películas imprescindibles.
Si alguno tiene peticiones de películas estaré encantado de dar mi opinión.
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